Extra Time! Parte 7 (CORRECCIÓN)

CORRECCIÓN DEL FINAL DEL DÍA DOS.

No, nel, nanay. Ya me estaba olvidando. Uy, que meyo. Si mi memoria empieza a desvanecerse apenas unos meses después del evento, no me imagino cómo le hicieron los autores del Nuevo Testamento.

Ese día no me bajé antes de llegar al hotel, sí arribé al Holiday Inn. Al descender de la van, me topé con un grupo de extras rodeando a Julio Toledo, como jugadores de football americano congregados mientras comentan su estrategia a seguir. Me acerqué y escuché el plan que se estaba cocinando.

Julio explicaba la necesidad de reunir un equipo confiable de extras, fieles en las más duras condiciones. ¿En las más duras condiciones? Subrayar más y duras. ¿Todavía nos aguarda más por sufrir? La respuesta es: sí; aparentemente.

Sería un grupo de extras que estuvieran disponibles no importa cuándo les llamasen. Se enrolarían en unas pesadas jornadas, donde no habría marcha atrás para los quejumbrosos. Les nombró “todoterreno” a la brigada de figurantes. Irían en una misión suicida desde Hermosillo hasta Cananea. Explicó a la perfección las dificultades del viaje, y el tiempo a invertir. Mucho. Advirtió que sería latoso y, sobre todo, cansadísimo.

Es un viaje no para cualquiera. Y luego faltaría la venida. Se invertirían algunos días, yendo y viniendo, según se presentara la ocasión. Un par de extras junto a mí, comentaban sobre el permiso que les habían dado en el trabajo, pedir más estaría difícil. Pensé: este sería su último día, entonces. Sus ansias por continuar participando, sin duda, serían menores a las obligaciones y responsabilidades que tienen en casa para con su familia.

Julio comprendía las posibles respuestas negativas. Esto no es una obligación, sólo una petición voluntaria, con sueldo, por supuesto. También, dijo, buscaría la manera de pagarles más, quizás el doble. A ver si sucedía, no era algo seguro, pero le haría la lucha con los productores. Las últimas palabras convencieron a los alborotados. ¡Válgame!

El dueño de la agencia de casting traía una hoja para ser firmada por quienes se prestaran a la aventura “todoterreno”. La mayoría se abalanzó a llenar los datos. Hasta ahí con las responsabilidades y obligaciones en casa. ¿Y el permiso del trabajo? No importa, los jefes siempre son comprensivos.

El plan sería andar todo el día desde temprano en el autobús, bajarse en algunos hoteles durante la ruta para alistarnos con la vestimenta y utilería. Luego, nos filmarían actuar comiendo y reposando en los diferentes alojamientos de varios pueblos. Serían secuencias del recorrido de los marchantes protestantes por diversas zonas de su expedición, siendo amablemente convidados de alimento y hospedaje por los humildes pueblerinos.

No, gracias. Despacio me retiré del montón firmante. Me conformo con aguantar calores aquí en la ciudad. Aunque, una parte de mi me decía que debía haber aceptado ir. Quizás perdía una oportunidad irrepetible de viajar en la caravana, acompañando al equipo técnico y los actores. Porque, ¿cuándo volvería a pasarme eso? Pues espero que pronto, según mis planes.

No, la verdad, no se me antojo la aventura “todoterreno”. Estaba muy cansado. Ni siquiera aceptaría el llamado de contactarme la agencia de casting al día siguiente. Cananea está muy lejos, cercana a la frontera de Estados Unidos. Sería un largo tramo hasta allá en camión. Y quién sabe si tendrían baños los autobuses; asunto muy importante.

Si me quejara en medio camino, ellos de seguro dirían que fui advertido muy específicamente de los posibles problemas, además que firmé el trato. Después de todo, no quería ser como aquél extra que, según me contaron, se rajó en Pesqueira. Me imagino que su razón ha de haber tenido.

No es para mí. Me alejé del hotel, sumergiéndome en la oscuridad de la noche, rumbo a casa a descansar mis adoloridos deditos de los pies.

Y ESTE SÍ FUE EL FINAL DEL SEGUNDO DÍA.

Comentarios

Entradas más populares de este blog

CÓMO REGISTRAR OBRAS EN INDAUTOR DESDE EL INTERIOR DEL PAÍS

“FADE IN:” ¿FUNDIDO DE ENTRADA?, ¿DISOLVENCIA DE ENTRADA? o ¿DESVANECIMIENTO DE ENTRADA?

¿Cómo registrar una obra en INDAUTOR desde el interior del país? (Actualizado)